Los retos planteados por los maestros y los sistemas educativos internacionales continúan intensificándose cada día más. En las modernas economías basadas en el conocimiento, donde la demanda de alto nivel cognitivo seguirá creciendo considerablemente, la tarea en muchos países consiste en transformar sus modelos tradicionales de enseñanza. Estas naciones han sido eficaces en distinguir aquellas que son más académicamente talentosas y aquellas que no lo son, dentro de sistemas instruccionales personalizados que identifican y desarrollan los talentos de todos sus estudiantes. Para ello se requirió la creación de sistemas educativos basados en evidencia "rica en conocimiento", en donde los líderes administrativos y educadores actuaron como una comunidad profesional con la autoridad para hacerlo. Esta información les permitió actuar sabiamente brindando el acceso a sistemas de apoyo efectivos para asistirlos en la impementación de los cambios.
El Cuestionario Internacional de Enseñanza y Apendizaje (Teaching and Learning International Survey: TALIS), de la OECD, proporcionó información detallada sobre cómo los sistemas educativos han respondido al facilitar la primera perspectiva comparativa internacional sobre las condiciones de la enseñanza. TALIS se basó en la revisión de 2005 sobre la política docente en la que se identificó importantes lagunas en los datos internacionales y pretendió ayudar a los países a revisar y elaborar sus políticas institucionales para hacer la profesión docente más atractiva y eficaz. TALIS se conceptualizó como un programa de encuestas con rondas sucesivas destinadas a abordar las cuestiones pertinentes para las políticas elegidas por los países.
Con un enfoque inicial basado en la baja calidad de la educación secundaria de los sectores público y privado, TALIS examinó importantes aspectos sobre los docentes en los siguientes factores: desarrollo profesional de los profesores, creencias, actitudes y prácticas, evaluación docente, retroalimentación y liderazgo educativo en los 23 países participantes.
Los resultados del cuestionario TALIS sugieren que, en muchos países, la educación aún está lejos de ser una industria generadora de conocimientos, en el sentido de que sus propias prácticas están siendo transformadas por conocimientos acerca de su propia eficacia y no de la instrucción como tal. Los 23 países que han tomado parte en el estudio ilustraron el creciente interés en las lecciones que pueden ser aprendidas de las políticas docentes y las prácticas empleadas en otros lugares. TALIS proporciona un primer instrumento innovador para permitir a los países participantes ver su propia profesión docente a la luz del éxito compartido entre las naciones participantes. Naturalmente, la política de soluciones no fue simplemente una copia de otros sistemas educativos o experiencias. El análisis comparativo inicial pudo proporcionar una comprensión de los conductores reglamentarios que contribuyeron al éxito de las políticas docentes para ayudar a situar y configurar estos controladores en sus respectivos contextos nacionales.
El cuestiojnario TALIS es un claro ejemplo del esfuerzo colaborativo entre los países miembros de la OCDE y las naciones asociadas dentro de un marco organizacional. No cabe duda que la colaboración social y el intercambio de información producen grandes rsultados. Lamentablemente, aún existen instituciones educativas que funcionan localmente sin tener idea alguna de lo que ocurre en el exterior. Todavía impera el paradigma individualista que nos segrega y limita el alcance que se puede obtener cuando vamos más allá de lo que ya sabenos o tiene significado para nosotros. La falta de productividad, capacidad para investigar y desarrollar nuevos proyectos nos lleva a una actitud basada en consumir productos educativos eleborados por instituciones foráneas. En muchas ocasiones se raya en el fracaso porque el contexto social, cultural, tecnológico, cognitivo y pedagógico no es el mismo. Sólo conociendo a profundidad nuestras instituciones, investigando y colaborando a nivel local e internacional es que se puede desarrollar proyectos educativos de largo alcance.
Es por esta razón que muchos educadores que conocen bien el uso de la tecnología acceden a diversos recursos informativos para beneficiarse del conocimiento global. Unos se quedan en esa actitud individualista (1.0), mientras que otros la comparten con la comunidad educativa mundial desde sus páginas web, blogs, redes sociales y entornos de contenido abierto (actitud 2.0).
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